domingo, 27 de enero de 2013

Noche desastrosa

Antes de nada quería comentarles que tuve que cerrar el nuevo blog por temas de seguridad, básicamente me lo dejé abierto y creó que alguien lo vió, y para asegurarme seguiré aquí, a la vieja usanza. Vida, estudios, comida, dramas y alegrías...
Ahora ya sí que sí os cuento lo que me pasó...
Hay un chico del que creo que he hablado alguna vez aquí, que en bachiller anduvo detrás de mi y yo le "rechacé" cuando realmente me gustaba. ¿El por qué? Pues la verdad es que fueron un cúmulo de cosas. Por un lado, algunos de sus amigos ya nos hacían la vida imposible picándonos hasta un punto que no os podeis hacer una idea. Y por otro lado estaban mis complejos, yo y la comida. Me veía tan horrible que tenía pánico al rechazo, así que antes de que me hiciesen daño corté por lo sano. Bueno pues ahora, 3 años después cuando nos vemos sigue habiendo ese feeling, digamos que es como una asignatura pendiente. Y ayer una amiga  mía me dijo "no te enfades ni nada pero es que en serio sois tal para cual" y otra también comentaba con un amigo suyo que había "cierta tensión sexual".
Y ¿qué fue lo que pasó? Que se puso con el whatsapp y salió del bar donde estábamos un instante y de repente me aparece con una tía, nos la presenta y nada más darle yo dos besos, va y le come toda la boca en mis narices. Os juro que sentí como si me hubiesen clavado una estaca en el corazón, me quedé paralizada, sé que la culpa es mi por haber sido tan estúpida en mi día de rechazarle pero aun así duele... Seguido cogí mi móvil y le dije a la única amiga mía que no se había ido que iba al baño un momento. Necesitaba respirar, chillar, llorar, ALGO! Después de 10-15 min salí y cuando estaba mojándome un poco la nuca, aparece un chico y me dice:
+ "Uy perdona, pensé que era el baño de los chicos"
- "Tranquilo, es esa puerta de ahí"
Mientras tanto mi amiga, la que aun estaba en el bar, le había puesto al día a la otra que ya había marchado y me empezó a decir por whatsapp que no me rallará y tal, que valía mucho más y lo típico. Y cuando estaba contestándola de repente aparece otra vez ese chico...
+¿Estás bien? Por cierto, soy Patrick.
- Lo estaré.
+¿Te puedo ayudar?
Y ahí no sé si fue el alcohol, el cabreo que tenía, impulso de venganza o lo que sea pero sin pensarmelo dos veces le besé pero de una manera que no me reconocía.
+Gracias, por cierto yo soy ******.
Y fue donde había dejado al resto. Por suerte ya no estaban intercambiándose babas...Pero cogió y se fueron a la calle de la manita. En fin, seguido me fue con mi amiga y uno de sus amigos a otro bar a bailar y olvidarme un poco o al menos intentarlo. Aunque era un poco difícil hacerlo cuando su amigo y la mía le estaban poniendo a parir, lo que en parte me reconfortaba pero mi culpa seguía ahí...

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